Tomad papel de plata, haced un río,
colocad encima de él un puente,
fabricad un portal, ponedle enfrente,
de papel y cartón, un caserío.
Simulad la blancura del rocío,
con un poco de harina y, lentamente,
hacedla que descienda suavemente,
como la nieve cae, blanca de frío.
Colocad las figuras una a una,
la Virgen y José junto a la cuna,
y en ella el niño echado.
Y si después que todo lo habéis hecho
sentís que hay una estrella en vuestro pecho,
es que está el nacimiento terminado.
Luis López Anglada
Imagen: http://www.silvitablanco.com.ar/belen/30Manger.jpg
1 comentario:
Bonita idea.
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